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En los últimos años se ha ido perdiendo poco a poco la formalidad en el vestir y el paliacate ha venido a remplazar al pañuelo.
Mientras que las mujeres cargan en sus bolsas todo lo necesario para un apocalipsis zombie incluyendo kleenex, los hombres traemos lo mínimo posible pero de igual forma se nos afloja la nariz y acabamos aplicando la de niño chiquito limpiándonos con lo que encontramos. En países como el nuestro donde el calor y el polvo son parte de nuestra cotidianeidad es importante tener con que limpiarnos la cara de vez en cuando. Ahora con la nueva forma de vivir un palicate puede hacer las veces de un tapabocas improvisado cada vez que se nos olvide éste al salir de casa y hasta para limpiar superficies. Hoy más que nunca es importante que el paliacate se lave diariamente.
Pero la razón histórica del pañuelo y hoy del paliacate es la galantería y cortesía de poder dárselo a alguien más que lo necesite y que estén en un estado vulnerable. No hay nada más reconfortante que sentir en nuestras manos y cara algo suave, no porque los tiempos se han ido relajando la caballerosidad se tiene que perder. Además son reusables y contaminan menos.
Como portar un paliacate en estos días? La bolsa trasera de los jeans donde sobresale un poco el paliacate (igual que como antes veíamos los pañuelos en las bolsas del pecho de los trajes hoy en total desuso) o en el cuello enrollado como Boyscout haciéndolo un accesorio de uso diario.